ESCRITORES ASESINOS | Cuando el autor se inspira en sus hechos más oscuros


¡Octubre! El mes donde es más permitido leer, escribir y ver más terror que todo le resto del año. ¡Ja! Pero hay personas que literalmente viven el arte del miedo, de hacer sentir a las personas que no están seguras y que en cualquier momento pueden morir, por eso quise escribir sobre los escritores asesinos.

Y no, no estoy hablando de George R. R. Martin –ese infeliz que juega con nuestros sentimientos-, les hablo sobre escritores que en la vida real sí fueron unos asesinos y dejaron plasmadas en sus historias el cómo cometieron sus asesinatos, aterrador, ¿no? 

 

La documentación de los escritores y el asesinato.


Antes de comenzar a explicar quienes fueron esos escritores que se convirtieron en asesinos, es importante aclarar que no todos asesinaron por el placer de la documentación, porque sí, nosotros como autores debemos documentarnos y saber al cien por ciento de lo que vamos a escribir; y hay miles de escritores que jamás han asesinado a alguien, pero las descripciones de sus asesinatos son bien logradas gracias a la documentación, observación y el saber engranar una narrativa lógica y coherente al momento de describir los hechos.

No importa lo perturbadores que sean, todo se puede lograr siempre que tengas la mente bien focalizada en el proceso de creación. 

 

La delgada línea del arte y la muerte define el comportamiento entre un verdadero asesino y el hecho de ser escritor

Como todo en la vida, hay humanos que van más allá y quieren narrar el arte de la muerte, describir la perfección de su acto homicida o simplemente son ególatras que quieren demostrarle al mundo de lo que son capaz. 

Esto es normal entre las mentes asesinas, la atención y el reconocimiento, -eso también lo queremos los autores- pero aquí voy a mencionar escritores asesinos que sí eran ególatras, y otros que sencillamente tomaron malas decisiones.

¿Quiénes fueron escritores asesinos?

Los dividiré en dos partes para que sepamos cómo es que estos escritores usaron a su favor el haber cometido un delito. 

Escritores que Asesinaron antes de ser famosos en su oficio

#1 Escritor: Anne Perry

Británica creadora de novelas de detectives y de misterio.

Cargo: Asesinato. Le quitó la vida a la madre de su mejor amiga, con ayuda de dicha amiga. Tenía para entonces 15 años. Fueron encarceladas por separados y condenadas a no verse más nunca. Estuvo en la cárcel por cinco años. Al salir, se mudó a Escocia y tomó el nombre de Anne Perry. Luego, lo que ya se sabe, se puso a escribir.

#2 Escritor: Issei Sagawa

Japonés, creador de novelas crónicas negra.

Cargo: Homicidio. Le quitó la vida a una compañera de estudio. Le disparó en el cuello y luego se comió parte de su cuerpo. Fue detenido mientras intentaba deshacerse del resto del cadáver; le hicieron exámenes médicos y fue declarado –léase bien-, “demente e idiota”, por eso no fue a la cárcel, fue detenido por varios años en un hospital psiquiátrico.

Estando encerrado publicó en Japón su libro autobiográfico y se hizo muy famoso.

Luego de aquí hay dos versiones de la historia, unos dicen que lo deportaron a Japón porque las autoridades estaban hartos de él –por su fama-, en Japón fue liberado por incompetencia de las leyes; y otros dicen que cayó enfermo en Francia y su padre siendo alguien poderoso le pidió al gobierno Francés que lo enviaran a Japón para que muriera en su país, el hecho fue que Isse Sagawa se recuperó y actualmente es libre como una mariposa.

#3 Giuliana Llamoja

Peruana. Poeta.

Cargo: Matricidio. “Asesinó a su propia madre”. ¿Cómo lo hizo? Apuñalándola 65 veces. Alegó maltrato verbal y psicológico por mucho tiempo, cosa que sus vecinos en el juicio confirmaron.

Fue condenada a 20 años de prisión. Luego su sentencia fue rebajada a 12 años. Y fue liberada en el 2009. Solo estuvo 4 años en prisión. Aclaro, su padre es Juez.

Actualmente, es abogada penalista con experiencia en la solución de controversias legales.

#4 Krystian Bala

Polaco. Novela Negra. Filosofo.

Cargo: Asesinato. Planificó el asesinato de un publicista. No lo hallaron culpable hasta tres años después cuando publicó su novela llamada Amok en el 2003 que se volvió un superventas.

Donde describió las escenas “con mucho detalle” de un asesinato muy parecido al de ese empresario. Él siempre afirmó que era inocente, que solo fue buena documentación, pero lograron culparlo porque el celular donde había llamadas registrada hacia su víctima apareció luego de ser subastado cuatro días después del asesinato.

Le dieron 25 años de prisión, hasta donde se sabe comenzó a escribir una nueva novela llamada “De Lyrik”, cabe destacar que la policía logró determinó que Krystian preparaba otro asesinato para que coincidiera con lo narrado en su nueva historia, este hombre sí que está bien loquito.

 

Escritores asesinos en pleno ejercicio de sus actividades


 #1 Richard Klinkhamer

Holandes. Creador de novelas negras

Cargo: Homicidio Involuntario. Asesinó a su esposa y escondió su cuerpo en el piso de concreto de un cobertizo en el patio trasero de su casa. Siempre fue sospechoso y no lo culparon hasta años después que consiguieron el cuerpo.

Lo más increíble de este escritor, es que él le hizo llegar a su editor, un año después de la desaparición de su esposa un manuscrito sospechosamente autobiográfico donde explicaba varias formas de asesinar a una esposa. El editor rechazó el manuscrito por ser espeluznante.

Cumplió siete años en prisión y luego lo dejaron libre por buena conducta. Falleció a los 78 años.

#2 Blake Leibel

Canadiense. Creador de cómics, guionista, novelista gráfico.

Cargo: Asesinato en primer grado, tortura y caos de su prometida.

Se los resumiré, porque está el cargo de “caos” en su expediente, lo que él hizo fue tan espantoso que quien realizó la autopsia expresó que jamás había visto algo tan brutal y doloroso.

Las causas de sus acciones se desconocen, pero lo que sí quedó claro, es que estaba imitando una de las escenas de su novela gráfica.

Actualmente sigue cumpliendo condena.

#3 María Carolina Geel

Chilena. Creadora de novelas de varios géneros y también hizo crítica literaria.

Cargo: Asesinato de su amante. La condenaron a tres años de prisión, en ese momento escribió su novela más conocida llamada: "Cárcel de mujeres”.  

Ella recibió el indulto de presidente Carlos Ibáñez del Campo dejándola libre antes de que culminara su sentencia. 

Murió a los 82 años.

 

#4 William Burroughs

Estadounidense. Novelista, ensayista, crítico. Seudónimo: William Lee / Bill Lee

Cargo: Homicidio culposo. Bajo los efectos del alcohol y la droga, asesinó a su esposa al intentar reproducir la proeza de Guillermo Tell, “atravesar con una flecha una manzana colocada sobre la cabeza de su hijo”. Todo salió mal porque usó una manzana sobre la cabeza de su esposa, pero usó un arma. Lo demás, ya se lo imaginarán.

Estuvo 13 días en la cárcel mexicana, su hermano se encargó de sobornar a todo el que pudo, para que lo liberaran bajo fianza mientras se le realizaba el juicio. Este juicio se retrasó mucho y para el momento en que se le dio sentencia de “2 años” él ya se había ido a Estados Unidos. No pude determinar en mi investigación si cumplió o no con su condena.

Murió a los 83 años.

 

Una opinión muy personal sobre los escritores asesinos…


Estoy segura que habrá por ahí más escritores asesinos que no han sido acusados o que por su mente organizada, perfeccionista o muy coherente aún no han podido ser detenidos por las autoridades, ¿tú conoces algún escritor que escriba sobre asesinatos? Huy, yo siendo tú, pongo cuidado. –Aclaratoria, esto fue sarcasmo-.

Por otro lado, la justicia es de terror, todas esas condenas y sentencias parecen un mal chiste. Leer todo eso al menos para mí, sí fue causa de horror e indignación. 

 

Para culminar, les dejo un escrito de un escritor asesino

Es una traducción, pero se aprecia muy bien su acto, mi intención es que conozcan en primera persona los que le ocurrió a Hélène.

"Ante mí: Hélène tumbada de espaldas, también en bata... Arrodillado a su lado, inclinado sobre su cuerpo, me dedico a masajear su cuello... Presiono mis dos pulgares en el hueco de carne que bordea la parte superior del esternón y, aplicando fuerza, alcanzo lentamente, un pulgar hacia la derecha, un pulgar hacia la izquierda en ángulo, el área más firme debajo de las orejas... El rostro de Hélène está inmóvil y sereno, sus ojos abiertos están fijos en el techo. Y de pronto me asalta el terror: sus ojos están interminablemente fijos, y sobre todo aquí está la punta de su lengua, inusualmente y pacíficamente, entre sus dientes y sus labios. Ciertamente había visto cadáveres antes, pero nunca en mi vida había visto el rostro de una mujer estrangulada. Y, sin embargo, sé que se trata de una mujer estrangulada. ¿Qué está pasando? Me levanto y grito: ¡he estrangulado a Hélène!"

- Althusser, L'avenir dure longtemps  - “ Este escritor, Asesinó a su mujer Hélène

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